50 aniversario de Sketchcrawl Sevilla.

Durante mucho tiempo pensé que dibujar era un hobby solitario. Sin embargo, no hace demasiado tiempo encontré iniciativas tan interesantes como Sketchcrawl, un punto de encuentro para dibujantes en el que compartir esta afición y con los que salir a la calle a retratar la ciudad. El pasado 23 de Enero fue su 50 aniversario y para celebrarlo se convocó una quedada en el Espacio Santa Clara.

Para ser sincera, no conocía en absoluto este lugar y quedé muy impresionada. Se trata de una sala de exposiciones ubicada en un antiguo monasterio de estilo Románico. Al llegar nos indicaron el camino al claustro, un precioso patio interior y varios lugares exteriores en los que deleitarnos con la arquitectura y en el que buscar cual caracoles un rayito de sol para calentarnos en esa fría mañana. El espacio era amplio y pudimos distribuirnos sin problemas, buscando las perspectivas y rincones más interesantes. Me pareció además, una buena forma de conocer y apreciar el patrimonio.

Debo admitir que dibujando arquitectura me siento totalmente fuera de mi zona de confort y por lo tanto espero que seáis indulgentes con el resultado. Es un camino en el que apenas he experimentado y que de no ser por estos encuentros no investigaría. Un nuevo reto del que aprender con la práctica para ir expandiendo horizontes. De momento, más que agobiarme con proporciones y mímesis decidí dedicarme a disfrutar sin más (ventajas de no tener que dibujar para aprobar).

Precisamente estuve probando mi nuevo juguete, este set de plumas caligráficas de Tiger, con el que disfruté como una enana. Es una gozada jugar con los gruesos de lineas, crear manchas etc. Me divertí especialmente con esas texturas casi puntillistas que hice en los árboles. Atrás quedaron los botes de tintas y nogalina y los palillos de bambú o mondadientes. Ay, esos recuerdos de la facultad... Las plumas ofrecen mucha comodidad, limpieza y son fáciles de transportar lo cual es importante para dibujar en la calle.

Para mi sorpresa, cuando me puse en contacto con el grupo de facebook para mantenerme al tanto de quedadas y otros menesteres vi que la organizadora de Sevilla era nada más y nada menos que mi profesora de educación plástica de la secundaria. La primera persona en toda mi vida que comenzó a animarme para estudiar Bellas Artes. Casualidad o cosas de la vida, me dio muchísima alegría volver a tener contacto con ella y comentarle que efectivamente hice la carrera. Pero por segunda vez, durante este aniversario me encontré con otros de los profesores que, aún cuando yo juraba que no sería capaz de hacer la carrera, me animó para que me pusiera a ello. Una de esas personas que me dejaron huella. No sólo tuve la oportunidad de reencontrarme con ellos sino también el placer de poder sentarme codo con codo y compartir truquillos dibujantiles.

Desgraciadamente tuve que marcharme a trabajar antes de la foto de grupo. Me hubiera gustado poder quedarme más y dibujar más. Fue sorprendente ver la cantidad de dibujantes que acudimos a la cita, todo un éxito que hay que repetir.